Ya llegó el verano, que alegría! aunque llega con un día gris a más no poder, sólo la palabra y la fecha me recuerdan un millón de cosas geniales, qué ganas de que lleguen ya las vacaciones!
A continuación cuatro de las pequeñas cosas que hacen esta estación tan especial para mi:
1. Leer al aire libre
Grandes momentos de todos los veranos son esos que pasas con un buen libro, no necesariamente una gran obra literaria, pero sí algo que te entretiene, te transporta...
Ahí en la playa, con el olor a crema, los pies enterrados en la arena, el sonido de las olas... bueno, y de algún niño gritón, tampoco hay que pasarse idealizando la realidad...
O en el campo, por la tarde, quedándote medio dormida mientras lees, sin prisa.... Que ganas!
2. Los helados
Están buenísimos! pero a mí no me gusta tomarme un helado en casa en invierno de postre, no sé, no le veo la gracia.... sin embargo un buen helado mientras vas dando paseo por la calle, ahí con las prisas de que no se derrita... Probar los nuevos sabores de cada año, tomarse un corte de turrón de Verdú en el parque San Francisco, y un helado de cucurucho paseando por el Muro, son elementos imprescindibles de mis veranos.
y nada de esos malditos yogures que pueblan ahora mi ciudad y todas las que visito! odio el yogur, no me gusta nada su sabor, y sólo pensar que los helados puedan ser sustituidos por yogures helados.. mi peor pesadilla!!!
3. Las sandalias
Por fin los pies se ven liberados de calcetines, botas, medias, cordones.... Salen los dedillos a pasear, cada día te puedes pintar las uñas de un color diferente...
Asocio el verano a mucho caminar, pasear por la playa, hacer turismo, dar un paseo al atardecer.. y para ello unas sandalias cómodas son aliadas imprescindibles.
4. Los cócteles
Estos son una nueva adquisición a mis veranos, pero ya se han hecho imprescindibles. Desde que dije adiós a los 20 las resacas se me hacen insufribles, así que tomar copas me da una pereza horrible.
Pero los cócteles son frescos, son bonitos, dulces y más suaves... Y encima hay un millón para elegir!
Creo que un poco de culpa la tiene también una amiga brasileña que me enseño a hacer caipirinhas "de verdad"!
Y a vosotros? cuales son esas pequeñas cosas que os encantan del verano?